Ubicada en un sector alejado y relegado del centro de la ciudad, en permanente expansión.
En un principio, los vecinos no querían la plaza, ya que argumentaban que nada de lo que se colocaba allí, duraba.
Diseñando y proyectando sobre los planos, entre todos los actores involucrados, se logro poner en marcha la obra, realizada por obreros del barrio.
Además se realizaron numerosos talleres con la escuela y los vecinos para generar un marco de apropiación de la plaza.
Este proyecto fue realizado con fondos provenientes del Gobierno Nacional (Secretaria de Hábitat) y ejecutado por la Municipalidad de Esquel.